Hace tiempo que no cuelgo un retrato así que hoy he optado por uno.
Se trata de un pescador de Villajoyosa, de un hombre de mar. Mirándolo podemos darnos cuenta de la vida que ha llevado. Este rostro está cargado de información.
Nos habla de un hombre curtido por el trabajo, el sol, el cansancio que el peso de la experiencia de vida conlleva. Seguramente cuando se siente con sus nietos tendrá muchas batallas que contar. No hablará de peces imaginarios ni de navíos de ficción, para eso Disney es el número uno. Él les contará episodios vividos llenos de emoción, peligro, ilusión, compañerismo.
Ojalá que su audiencia sepa valorar todo lo que sus relatos pueden enseñar. No en vano ha madrugado toda su vida para enfrentarse al mar, que aunque es inspirador y bucólico, también es naturaleza salvaje y digno de respetar.
HOMBRE VILERO, 1971 Acuarela 45 X 60 |